En el siglo XVII las figuras de don Quijote y Sancho, y también la de Dulcinea, se adaptaron a géneros nuevos que estaban surgiendo en los países europeos: la comedia burlesca o la comedia de figurón en España, la tragicomedia en Francia, o el melodrama en Italia. Los personajes quijotescos se percibieron como nuevos tipos cómicos, bien caracterizados, y por lo tanto funcionales, en un teatro en pleno proceso de renovación, pues ofrecían la posibilidad de un rápido reconocimiento por parte del público, así como una gran libertad creativa, al carecer de antecedentes normativos. Los dramaturgos y libretistas tomaron de la novela, además, una serie de recursos estructurales basados en la oposición y el contraste, como el de la comicidad visual o el de la locura especular, que se configuraron como ejes estructuradores de las nuevas obras, amplificando motivos presentes en la novela cervantina, cuya teatralidad se ha estudiado ampliamente en los últimos decenios.
El método de análisis adoptado, contrastivo y transnacional, permite observar las invariantes que interesaron a estos autores, así como las transformaciones debidas a los diferentes horizontes de expectativas de los diferentes países y épocas en las que la novela se reelaboró. Se observa así, por ejemplo, en el teatro francés, una concepción de la locura con un carácter hedonista, en la línea de Erasmo, que contribuyó a la difusión de una imagen ligera, alegre y decorosa de don Quijote y Sancho; mientras que unos decenios más tarde, en el melodrama italiano, se propondrá la locura con rasgos deformantes y grotescos, como se había hecho en España en las primeras mascaradas y entremeses, porque la locura en Italia y en España se percibió como una falsa percepción de la realidad que los hacía aparecer risibles, o incluso grotescos.
De este análisis emerge la posibilidad de interrogarse sobre el horizonte de expectativas en la época en que Cervantes escribió el Quijote, y si estas reescrituras sirven para aportar nuevas lecturas, coherentes, que podrían integrarse a las realizadas tras el cambio de paradigma del romanticismo.